La inversión para el nuevo estadio de la Roma, de aproximadamente 570 millones, será financiada parcialmente por Bank of America y JPMorgan. Así se desprende de los documentos oficiales presentados y que, en términos de ingresos, prevén unos 70 millones por temporada, según informa La Gazzetta dello Sport.
Hace algunos días la directora general Lina Souloukou dijo: «El proyecto de un estadio propio es uno de los pilares de un proyecto deportivo, no hay gran club sin casa propia«. Ya esta abierta la plataforma online para el debate público. El 7 de septiembre se celebró la primera reunión.
Volviendo a la inversión del estadio cuenta el diario Il Romanista por su parte que al fin y al cabo, la familia Friedkin, se leen en el expediente presentado por Roma, y ahora accesible para todos en la plataforma para el debate público, puede presumir de ser un grupo que en 2022 alcanzó una facturación de 11 mil millones de dólares. En particular, el presidente de la Roma, Dan Friedkin, «dispone de recursos considerables, gracias a su amplia y diversificada cartera de inversiones caracterizada por una larga y sólida trayectoria«. Y gracias a esta solidez personal y corporativa, el Presidente pudo obtener «la implicación de dos grandes entidades financieras, Bank of America y JPMorgan, ambas con una dilatada experiencia en la financiación de proyectos relacionados con estadios de fútbol, para garantizar una financiación adecuada para la realización del proyecto«.
Partir de estas garantías representa para la Roma y para el Ayuntamiento, que hasta ahora ha demostrado que quiere abrazar plenamente el sueño de la nueva casa amarilla y roja, una certeza sobre la que sentar las bases del procedimiento administrativo que inicia una nueva fase a partir de hoy.
