La fiscalía de la FIGC notificó a Marco Serra la conclusión de la investigación, anunciando también la remisión tras los hechos ocurridos en Cremonese-Roma con José Mourinho. Así informó ANSA. Tras su expulsión, José Mourinho fue sancionado con dos partidos de sanción, que luego fueron anulados.
Las investigaciones de la fiscalía dirigida por Giuseppe Chinè nacieron de las declaraciones del técnico giallorossi, que tras la expulsión había declarado en rueda de prensa que había sido ofendido por el cuarto árbitro Marco Serra y que «quería actuar legalmente».
Ahora el fiscal notificó a Serra la conclusión, impugnando la violación del artículo 4 del código de justicia deportiva (el que se refiere a los principios de lealtad y corrección) y el código de ética de la AIA . El árbitro de Turín -que fue el cuarto árbitro en la ocasión- tiene ahora cinco días para defenderse o pedir un interrogatorio. Luego comenzará la remisión al tribunal de la FIGC.
El fiscal Chiné acusa a Serra de violar el artículo 4 y de otras conductas incorrectas. Si en los próximos cinco días, a través de un escrito y una línea defensiva, Serra no pide un acuerdo de culpabilidad, habrá una remisión y un juicio. Entre otras cosas, el abogado de la Roma ha adjuntado a los documentos el el reportaje de Le Iene en los que se ve el labial de Serra y también sus declaraciones al corresponsal del programa.
Este viernes, mientras tanto, la Cámara de Apelaciones Deportivas decidirá sobre la inhabilitación de la sanción de José Mourinho. Hay tres hipótesis: eliminar la sanción, confirmarla en su totalidad (dos fechas) o reducirla a la mitad. En cualquier caso, para reiterar su versión de los hechos, parece que mañana, según filtran desde Trigoria, Mourinho volverá mañana a la fiscalía.