Desde que Lina Souloukou se convirtió en directora ejecutiva del club, hace 330 días, se ha hecho cargo de la Roma, gestionando directamente gran parte de los aspectos económicos, administrativos y deportivos de un club que intenta hacer de la sostenibilidad un verdadero credo. En un fútbol cada vez más deficitario pero al mismo tiempo cada vez más costoso, la directiva de la Roma, en sinergia con los propietarios, trabaja para construir un club competitivo en todos los aspectos cuenta Jacopo Aliprandi en el Corriere dello Sport.
Reequilibrar gastos y costes pero al mismo tiempo fijarse el objetivo de mejorar los resultados del equipo, necesario para incrementar la reputación deportiva y los ingresos económicos. Empezando por tanto por la entrada en la nueva Champions que traerá nuevos ingresos. En los últimos meses el director general ha tenido que lidiar con muchos aspectos del club. Desde los acontecimientos que rodearon el acuerdo de conciliación hasta las cuestiones relativas al proyecto del estadio Pietralata. Hasta la gestión de costes entre Trigoria y la sede del club en via Tolstoi y los nuevos acuerdos comerciales (para todos los equipos Giallorossi) como el firmado en octubre con Riyadh Season.
Pero también las iniciativas vinculadas a los proyectos de la UEFA sobre sostenibilidad y las loables de Amami e Basta contra la violencia contra las mujeres que la vieron participar en varios eventos con los primeros equipos femeninos y masculinos. A nivel deportivo, Souloukou estuvo en estrecho contacto primero con Mourinho y luego con De Rossi. Tras el adiós de Tiago Pinto es la única figura directiva cercana al técnico: «Aquí en Trigoria estoy en contacto muy estrecho con Lina, todos los días, y trabajamos para hacer las cosas bien«, palabras recientes de De Rossi.