Todos han hablado, ahora le toca a ella decir su verdad. La ex empleada de la Roma despedida tras la difusión de un vídeo íntimo entre jugadores y directivos del club ha sido citada por la fiscalía federal. Mañana por la mañana se enterará del sexgate que está sacudiendo a Trigoria. Junto a ella comparecerán Lina Souloukou, directora general del club Giallorossi y Lorenzo Vitali, abogado del club y firmante de la carta de despido cuenta el diario La Reppublica.
La justicia deportiva fue la primera en moverse. Quiere verificar las posibles responsabilidades de los miembros de Giallorossi con respecto a la difusión del vídeo. Según la reconstrucción de la mujer, habría sido un jugador de la Primavera quien robó el video de su celular para luego compartirlo en los chats del equipo. Dando lugar así a la hipótesis del porno de venganza en el interior del polideportivo Giallorossi. La mujer y su abogado también están considerando emprender acciones penales.
El joven futbolista, que entró en este asunto siendo menor de edad y ahora con 19 años, podría ser acusado de violar el artículo 4 de la justicia deportiva («principios de lealtad, corrección y probidad») y a la Roma del artículo 6 del mismo («estricto responsabilidad»). Según el agente contactado por Repubblica, el jugador no habría sido convocado: «No sé nada. No recibimos ninguna llamada telefónica. Pero 40 de ellos deberían ser convocados». Mientras tanto, el jugador, presunto culpable del robo del vídeo, saltó regularmente al terreno de juego ayer por la tarde con la Roma Primavera en el empate 1-1 contra el Inter en el Estadio Tre Fontane.
No hay sanciones por parte del club que, en el comunicado publicado el viernes por la tarde, no menciona el robo del vídeo ni ninguna responsabilidad de un socio en su difusión. Una probable omisión que la justicia deportiva quiere arrojar a la luz.
Será el turno de Vito Scala, gran amigo y ex entrenador deportivo de Francesco Totti además de entrenador del club Trigoria en el que el futbolista giallorossi fue el primero en admitir el robo. En caso de que se realicen más investigaciones, el novio de la empleada también podría ser escuchado como persona informada de los hechos. También fue contratado (y luego despedido junto a su socio) por el club Trigoria.
