La cura para el gol de la Roma puede ser jugar en Europa. En ese sentido, el partido de mañana por la noche ante el Hjk Helsinki pasa por cierto y puede ser aprovechado por Mourinho para subir la moral de sus delanteros, para que no rompan la tradición fuera de Italia según cuenta Corriere della Sera.
La Roma, de hecho, en Europa puede presumir de una racha récord de 31 partidos consecutivos siempre viendo puerta: la última vez que el ataque de los giallorossi se quedó en cero fue el 29 de octubre de 2020, en el partido en casa ante el CSKA Sofia que finalizó 0.-0. Esta es la racha más larga de un equipo italiano en la historia de las copas de Europa.
Después de ese partido, la Roma, incluso en las derrotas, siempre encontraba la red: en total son 68 en 31 partidos, con una media de 2,19 por partido. En Helsinki, por tanto, los giallorossi intentarán dar continuidad a esta cifra para llevarse a casa los 3 puntos y mantener vivas las posibilidades de alcanzar el segundo puesto de grupo de la Europa League.
Ante la obligada ausencia de Zaniolo, fuera durante 3 jornadas por la Uefa tras ser expulsado ante el Betis , Mourinho debería volver a proponer el ataque pesado con dos delanteros, Abraham y Belotti. Será una oportunidad para que ambos recuperen la confianza con el gol: el delantero inglés sigue seco en Europa y ha marcado sus dos goles esta temporada en Liga ante Juventus y Empoli.
Sin embargo, a la inversa para Belotti, que no marcó en Liga pero marcó en la Europa League, en la ida ante el Hjk Helsinki y luego en Sevilla ante el Betis. Dado que ambos no pasan por un buen momento de entrenamiento, cuál de los dos debería hacerlo mejor, podría reconfirmarse el próximo lunes en Verona en el campeonato.
Precisamente de cara al doble compromiso, Mourinho debería hacer alguna rotación: en defensa Kumbulla podría dar descanso a Smalling. Una posibilidad también para Viña, que podría jugar tanto de brazo en la defensa de tres, como de extremo por izquierda, con Zalewski por derecha. En el centro del campo un posible turno de descanso para Pellegrini, que salió maltrecho del partido ante el Napoli.
