Era algo que estaba presupuestado y no esperaron. Mourinho se vio inundado de pitos al entrar al Allianz Stadium de Turín en el reconocimiento de la grama ante la Juventus-Roma. Y justo antes había sucedido lo mismo cuando llegó el autobús al estadio: pitos dirigidos a la Roma y cánticos contra el Especial, enemigo número uno en el momento del Inter.
El telón en el medio del campo junto a Mourinho estaba Kumbulla, quien tal vez recordando el episodio en el que José se llevó la mano a la oreja tras la victoria con el United en la Champions League, hizo el mismo gesto con una sonrisa en su rostro. Cuando el equipo entró al campo para el calentamiento entonces, otros cánticos e insultos a José por parte de la afición de la Juventus: «Pedazo de m …», gritaron. Pero seguro que Mourinho cobrará aún así. Porque durante el 90 ‘será una batalla dentro y fuera del campo.
