La Roma ya esta en España: volverá el viernes en la mañana, al día siguiente del partido. Mourinho no hará cálculos de cara al derby, con razón, porque le importa mucho la Europa League y porque desconfía de la Real Sociedad, que estudia proyectos de remontada.
En definitiva, al campo saldrá el mejor equipo, con la comodidad de la presencia de Lorenzo Pellegrini que dio su disposición para jugar con casco protector. Se prestara atención a las elecciones técnico-tácticas de Mourinho. Recordando la estrategia de la ida, cuando atacó el diamante vasco con los dos extremos frescos, mañana podría desplegar en las bandas a Karsdorp y Spinazzola, que solo jugaron una mitad cada uno contra Sassuolo, con El Shaarawy listo para tomar el relevo.
Incluso en el medio, sin embargo, una novedad en comparación con Sassuolo es obvia: el regreso de Cristante, que estaba suspendido en la liga. A su lado debería confirmarse Matic, el hombre del partido en la ida. Mourinho lo reemplazó el domingo después de menos de una hora, en parte porque lo había visto nervioso por la reserva injusta que recibió y en parte para preservarlo.