José Mourinho ha alcanzado otro hito prestigioso en su carrera. Tal y como se anuncia en la web de la FIGC, el técnico portugués se ha incorporado al Salón de la Fama del fútbol italiano. El reconocimiento, instituido en 2011, rinde homenaje a los jugadores, entrenadores, árbitros y directivos que se han convertido en protagonistas en Italia.
José Mourinho obtuvo este galardón gracias a sus experiencias en los banquillos de Inter y Roma. Esta es la nota oficial: «Diez estrellas más ingresan al firmamento del ‘Salón de la Fama del Fútbol Italiano’, el reconocimiento establecido en 2011 por la FIGC y la Fundación Museo del Fútbol para celebrar a los jugadores, entrenadores, árbitros y directivos que han dejado un huella imborrable en la historia de nuestro fútbol».
«En presencia del presidente federal Gabriele Gravina y del secretario general Marco Brunelli, la comisión de premiación compuesta por el presidente de la Unione Stampa Sportiva Italiana, Gianfranco Coppola, y los directores de los diarios deportivos nacionales, en la persona de Federico Ferri (director de Sky Sport), Guido Vaciago (director de Tuttosport), Stefano Barigelli (director de Gazzetta dello Sport), Alberto Brandi, (codirector responsable de Sport NewsMediaset), Ivan Zazzaroni (director de Corriere dello Sport y Guerin Sportivo), Piercarlo Presutti (Responsable de Sport ANSA), así como Matteo Marani, como presidente de la Fundación Museo del Fútbol, se reunieron para elegir a los premiados de la undécima edición».
Estos son los galardonados: Gianfranco Zola (Jugador italiano), Zinédine Zidane (Jugador extranjero), José Mourinho (Entrenador), Alessandro Altobelli (Veterano italiano), Cristiana Girelli (Jugador italiano), Ernesto Pellegrini (Entrenador italiano), Siniša Mihajlović y Erno Egri Erbstein (presione para recordar). El Premio Especial, anteriormente otorgado a Gianni Brera, es para otro maestro del periodismo deportivo italiano fallecido hace tres meses, Mario Sconcerti, mientras que el ganador del premio Fair Play que lleva el nombre de Davide Astori es Luca Martelli, el joven árbitro toscano que el año pasado , mientras dirigía un partido de campeonato de Segunda Categoría, interrumpió el juego para ir a socorrer a su padre, espectador en la grada, ayudándole a salvar la vida con la ayuda de un desfibrilador».
Como es tradición, con motivo de la ceremonia de entrega de premios prevista para los próximos meses, se pedirá a los nuevos miembros del ‘Salón de la Fama del Fútbol Italiano’ que entreguen un recuerdo de su carrera destinado a la colección que se conserva en el Museo del Fútbol».
