¿Los presidentes de la Serie A? “Criminales de verdad”. ¿La liga de fútbol? “Como dijo Greco (ed., Francesco, ex fiscal jefe de Milán), es una organización de derecho privado… porque si no, los arrestarían a todos porque los habían declarado culpables de corrupción hace seis años con nosotros…”.
Preziosi, ¿ex presidente de Genoa? «Un verdadero delincuente». ¿El presidente de la Lazio, Claudio Lotito? El jefe. “Y nuestros amigos, la Juventus y la Roma, son tan culpables como él. Porque al final, o por una u otra razón, desistieron de pelear o lo mimaron y yo me hice cómplice de sus aventuras…».
En las actas presentadas por la fiscalía de Milán con la solicitud de sobreseimiento -presentada ante el juez de instrucción el pasado mes de marzo y aún no admitida- de la investigación sobre la supuesta coima pagada para la cesión de derechos televisivos, consta un expediente de interceptaciones telefónicas que riesgo de crear una gran vergüenza en el deporte italiano cuenta el diario La Reppublica. El teléfono interceptado es el del presidente del Coni, Giovanni Malagò.
Las llamadas telefónicas transcritas por la Guardia di Finanza son las útiles para el proceso: por lo tanto, las de Massimo Bochicchio, el corredor que estafó a media Italia del deporte, que murió en un accidente automovilístico en la víspera de su juicio este verano. Y los de los directivos de televisión y deportes con los que Malagò habló, precisamente, de la cesión de derechos.
Malagò está convencido de que la denuncia vino de Preziosi, entonces presidente del Genoa. “¿De qué deberíamos hablar?”, dice con sarcasmo el presidente de Coni. Pero tanto él como Zappia creen que el verdadero titiritero es Claudio Lotito.
“Me asombra –dice el directivo de Sky– que este señor que tiene un negocio enano, que ahora vive solo del fútbol que es lo que hace vivir a todas sus empresas”. “No hay duda”, interviene Malagò. “Marmaldeggi así”, continúa Zappia. «Pero al final, nuestros amigos, la Juventus y la Roma, son tan culpables como él». “Oh claro”, concluye Malagò, “dependiendo de las circunstancias, de los contextos, se vuelven cómplices de sus decisiones”.
