Davide Frattesi vuelve a ser el centro de atención del mercado, esta vez en invierno. Después de un año y medio, la Roma quiere volver a intentarlo, con un director deportivo diferente y un entrenador –romano y aficionado de la Roma– que ha avalado su posible llegada cuenta este sábado el Corriere dello Sport.
El club giallorossi no se rinde con Frattesi y sigue trabajando entre bastidores para llevar de vuelta a casa a «un hijo de Roma», citando a Ghisolfi. Al mismo tiempo, el Napoli se mantiene al margen, siguiendo de cerca la situación no sólo del centrocampista nerazzurri sino también de Lorenzo Pellegrini. ¿Y el Inter? Espere y observe cómo se desarrolla la historia después de dictar sus condiciones. Lo primero: Frattesi no es un problema para los nerazzurri y de hecho nadie tiene intención de venderlo; Más aún en el mercado de invierno. El segundo: ni Inzaghi, ni Marotta ni Ausilio tienen intención de reforzar a un competidor directo por el Scudetto, debilitando así al propio equipo y vendiendo un jugador de calidad al Nápoles. Precio –provocación- para el rival: más de 60 millones.
El tercero: Si Frattesi pidiera su traspaso, y hasta ahora no lo ha hecho directamente, la Roma de la Serie A sería el candidato preferido para venderlo. Precio del jugador para Friedkins (no provocador): 45 millones. Pero ojo: la última noticia es que son negociables, por lo que bajando hasta un máximo de cinco millones se podría cerrar el acuerdo con Ghisolfi. Naturalmente el Napoli está al margen en estos momentos, los Giallorossi están pensando seriamente en fichar a Cristante.
Por otro lado según Sky Sport, de hecho, son los Friedkins quienes quieren el regreso del centrocampista a la capital. En los próximos días la Roma hará una oferta al Inter con un contenido económico a repartir en los años y un jugador de la vieja guardia (Cristante o Pellegrini) como contrapartida. En ese momento puede comenzar una negociación que ciertamente no es fácil, pero tampoco imposible.