La Roma salió con solo un punto del partido a domicilio ante el Benevento, a pesar de haber jugado casi toda la segunda parte en superioridad numérica. El muro del equipo de Inzaghi aguantó y evitó que los capitalinos llegaran a un techo de 46 puntos, por lo que acumulan 44 puntos en la clasificación, separados -aunque levemente- de Lazio y Atalanta (ambos con 43) y a la espera del partido de la Juventus (42 puntos) frente a Crotone para cerrar la fecha.
Los giallorossi tendrán poco tiempo para recuperar energías, ya que el jueves volverán a jugar en la Europa League por el partido de vuelta de los dieciseisavos de final ante el Braga, tras la victoria por 2-0 en Portugal. Mañana la Roma aprovechará un día de descanso: los entrenamientos en Trigoria están programados para el martes por la mañana a las 11h00. Se atenderá la condición física de Bryan Cristante de forma especial.
