No solo del fútbol se ocupa la directiva giallorossi. De hecho, la Roma de Friedkin, tras superar el escollo de la revocación del Interés Público para la zona de Tor di Valle, viaja hacia la propuesta de una nueva zona sobre la que construir el estadio.
Precisamente para este último tema el jueves, escribe Massimo Cecchini en La Gazzetta dello Sport, el CEO del plantel capitalino, Guido Fienga, se reunió con la alcaldesa de la capital italiana Virginia Raggi, sentando las bases para futuras discusiones. Hay varias áreas en discusión (de Ostiense a Eur, de Tiburtina a Togliatti), pero será necesario trabajar en sinergia para definir una en poco tiempo, especialmente después de las elecciones.
Mientras tanto, los Friedkins intentan asegurarse el presupuesto. Para ello realizaron otro pago de 25 millones (188,3 los ingresados hasta el momento, aparte de la compra), mientras que el balance a 30 de junio arroja una deuda de 311 millones.