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Evan N’Dicka esta bien y fuera de peligro; el central esta en observación en el hospital, este lunes más exámenes

Este domingo se vivieron momentos de aprensión en Udine durante la segunda parte del Udinese-Roma. En el minuto 70 de partido, Ndicka se dejo caer a la grama, siendo inmediatamente el árbitro y los jugadores cercanos los que pidieron intervención médica, que entró en el terreno de juego con el desfibrilador (que no fue utilizado). El partido fue suspendido y el jugador fue trasladado al hospital.

Los detalles de lo sucedido

La preocupación viene inicialmente dada por el hecho de que Ndicka se desplomó solo y, además, Svilar salió de la puerta para llamar a los médicos. El desfibrilador entró al campo, pero no fue utilizado. Al principio la situación se calmó, el entrenador de la Roma, Daniele De Rossi, salió al campo para comprobar el estado de su defensa y antes de que se reanudara el partido se dirigió directamente al vestuario para comprobarlo él mismo. DDR regresó al campo y no mostró completa serenidad, por lo que el partido no se reanudó debido al gran temor por el estado del jugador.

Cioffi también expresó su plena comprensión reiterando: «Esperaré todo lo que quieras, no tenemos prisa». Tras una conversación con De Rossi y los jugadores de la Roma, Pairetto decidió suspender oficialmente el partido. Posteriormente, tanto Pellegrini como Mancini hablaron con la afición para explicar la situación. El partido, una vez decidida una fecha de recuperación, se reanudará exactamente desde el mismo minuto con el resultado 1-1.

Según informó Sky, de primer momento Ndicka se sometió a un primer electrocardiograma en el estadio, tras lo cual fue trasladado al hospital para ser examinado. Al llegar con código amarillo, el defensa marfileño estaba consciente. El electrocardiograma realizado en el vestuario generó algunas dudas sobre la posibilidad de problemas cardíacos. Posteriormente, el jugador fue trasladado de urgencia en ambulancia al hospital Santa Maria della Misericordia de Udine, según informó ANSA. Las pruebas realizadas a Ndicka demostraron que el marfileño padecía fibrilaciones debidas a la compresión de los pulmones, por lo tanto el infarto o patologías coronarias quedan descartadas, al menos de momento.

De Rossi que fue al hospital con todo el equipo, acaba de salir del centro medico de Udine y, dirigiéndose a la multitud de periodistas y teleoperadores presentes, tranquilizó a todos exclamando «Bien, bien». El técnico giallorossi se unió después al resto del equipo en el autobús que pronto llegará al aeropuerto de Trieste para regresar a Roma. Si el jugador no hubiera estado fuera de peligro, los Giallorossi se habrían quedado en Udine.

En este punto, las evaluaciones se centran en los efectos de los eventos traumáticos señalados anteriormente, si estos han tenido consecuencias, este lunes se realizaran mas exámenes. La Roma, por eso, a través de sus medios en redes, publicó una foto del zaguero en buen estado, flexionando el brazo, tranquilizando definitivamente a la gente sobre su estado.

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