Algo se está moviendo en las partes de Newham, un distrito del este de Londres, de hecho, el hogar de West Ham. Quizás ya se ha mudado a Australia, donde los Hammers cerraron ayer su gira, participando en Imperdible Football y ganando el ‘away derby’ ante el Tottenham por 3-2.
Gianluca Scamacca anotó el gol decisivo, a 12 minutos del final. Un gol que llega justo en un momento en que el West Ham está pensando en reunirse con la Roma y abrirse a un acuerdo de préstamo condicional (opción de compra u obligación) cuenta La Gazzetta dello Sport. En definitiva, un paso adelante respecto a la seca obligación de compra que pedían los británicos hasta hace unos días.
El jugador, como sabemos, sin embargo, quisiera cambiar pronto de aires, ya que ya se había prometido a la Roma. En este sentido, basta recordar las palabras expresadas hace unos días: «Siempre he razonado con el corazón y lo seguiré haciendo también en el futuro. Y sabes cuáles son los dos colores de mi corazón. Para mí, Roma es mi hogar. Y Totti, el ídolo de niño. ¿Y qué jugador del mundo no soñaría con ser entrenado por Mourinho? Estoy convencido de que me estimularía y con él mejoraría aún más«. Un auténtico mensaje de amor, con la Roma esperando recibirlo pronto con los brazos abiertos y dispuesta también a complacerle económicamente (este año el sueldo de Scamacca pasó de 2,8 a 3 millones de euros en el West Ham).
Entonces, ¿qué ha cambiado? En primer lugar que los Hammers han cobrado 120 millones por la venta de Rice y seguro que hay menos urgencias económicas que antes. En Londres están pensando por tanto en cumplir los deseos del jugador y la idea es aceptar una cesión paga (unos 3-4 millones de euros), pero con una obligación condicional ligada a los partidos jugados y la clasificación para la Champions. Un caso que permitiría a la Roma en 12 meses afrontar posiblemente el gasto de comprar un jugador que los ingleses pagaron hace un año unos buenos 36 millones (más 6 en primas).