El Torino-Roma podría quedar prohibido para los aficionados giallorossi. Es una hipótesis que se estaria manejando según el diario ‘Tuttosport‘ en relación al partido del 24 de septiembre a las 20.45 horas: el club granata hubiera querido iniciar ya la preventa, pero la Jefatura de Policía invitó al club a aplazarla al menos hasta el lunes. ¿Razón? Aún hay que esperar las decisiones del Observatorio Nacional de Eventos Deportivos.
Ese día, de hecho, también se jugará el Bologna-Napoli a las 18.00 horas y se teme que la concomitancia de los dos partidos pueda favorecer nuevos enfrentamientos en las carreteras entre las franjas de los ultras de Roma y Napoli: un segundo episodio más o menos reivindicativo tras los enfrentamientos del pasado 8 de enero en la A1, cerca de la estación de descanso de Badia Al Pino. Durante varios minutos las dos facciones se enfrentaron en la autopista, no por casualidad (lanzamiento de antorchas, piedras y bombas de humo, con peligro para los vehículos que circulaban en dirección sur e interrupción del tráfico en dirección norte, provocando una cola de 9 kilómetros).
Digos – se lee en el periódico – está investigando para intentar comprender los futuros «flujos» de los dos grupos de aficionados, el Observatorio decidirá pronto si limita prudencialmente la venta de entradas a los aficionados de la Roma y del Napoli residentes en Lazio y Campania para los próximos viajes a Turín y Bolonia.
