Stephan El Shaarawy tendrá que olvidar la decepción sufrida por la eliminación de los azzurri en octavos de final de la Euro, pero mientras tanto también empezará a pensar en su futuro. Se siente bien en Roma y en la Roma, tanto que hace apenas un año amplió su contrato hasta el 30 de junio de 2025, aceptando un salario de 2,5 millones de euros, inferior al del pasado.
Un año después, subraya Marco Guidi en ‘La Gazzetta dello Sport‘, el faraón resultó ser uno de los más beneficiados del cambio Mourinho-De Rossi, volviéndose muy fiel al nuevo técnico (y a su excompañero). Todo hace pensar que El Shaarawy también permanecerá en la capital, quizás ampliando de nuevo su acuerdo con la Roma. También porque el sentimiento con el técnico es definitivamente recíproco: el técnico difícilmente aprobaría su traspaso.
Por supuesto, existe el riesgo de que sin un nuevo contrato la próxima temporada pueda ser la última del faraón en los Giallorossi. Pero para un futbolista clase de 1992, el juego vale la pena.