Al Olímpico lo hemos visto últimamente hermoso, en toda su plenitud, pero nunca había cosechado tanta riqueza. Con el número ‘Sold Out’ número 53, para el gran partido contra el Milán, la Roma espera el récord de taquilla de la era Friedkin.
Gracias a la política de precios que aumentaron en comparación con el partido en esta misma instancia de la competición europea pero contra el Feyenoord del año pasado, el evento generará alrededor de 4 millones en ingresos asegura el diario deportivo Corriere dello Sport. Un triunfo económico que también provocó cierta polémica, porque el valor de las entradas disgustaron especialmente a los habituales del Olímpico, obligados a desembolsar sumas más elevadas a pesar del doble abono (campeonato más fase de grupos de la Europa League) que generó un ligero descuento.
Pero nadie, o casi nadie, quiere perderse la velada de gala que podría valer la cuarta semifinal europea consecutiva. Habrá casi 65.000 espectadores, con 4.500 aficionados del Milan que estarán sentados en la tribuna Distinti Nord y algunos otros repartidos por las dos gradas. En definitiva, el espectáculo de colores está garantizado, al igual que las emociones.