Bastaron apenas dos semanas para comprender que, como siempre, será un mercado mixto. De los primeros movimientos de Ghisolfi y de algunas confesiones de De Rossi, está claro que la Roma que vendrá se construirá con un ojo puesto en el hoy y otro en el mañana.
La idea es incorporar jugadores jóvenes que puedan crecer junto a los ya establecidos dentreo del equipo asegura Stefano Carina este jueves en el diario Corriere della Sera. Por ejemplo, Paredes es el titular inamovible, en el juego de parejas el perfil ideal es Prati. Cristante tiene su alter ego en Bove, Pellegrini busca en cambio su contraparte, que podría ser Matt O’Riley.
Para el puesto delantero centro, uno de los perfiles más seguidos es Omorodion pero no en las condiciones que propone el Atlético de Madrid. La dupla Dybala-Baldanzi puede tomarse como modelo para el proyecto que tienen en mente en Trigoria. Entonces está claro, si existe la posibilidad, con una serie de traspasos para ir al joven jugador top, la referencia es Soulé, la Roma estará lista. Pero para seguir adelante con este tipo de futbolistas primero tendremos que vender. Mucho y bueno.
