En el entorno de la Roma, existe la impresión de que la calificación directa para la Europa League, puede llegar con la luz verde para el proyecto del estadio y esto está motivando a Pallotta, según escribe Massimo Cecchini en la edición impresa de La Gazzetta dello Sport.
James mantiene la intención de vender el club al mejor postor, pero en este momento la única oferta garantizada es la de Dan Friedkin, que pone 575 millones sobre la mesa, incluidos 85 para para gastos corporativos, todo pagadero de inmediato. Pallotta ha recibido otras ofertas más altas de Sudamérica, Arabia Saudita y Estados Unidos, pero las condiciones de pago no son convincentes.
El plan de Friedkin está listo: a finales de agosto, Consob dará luz verde al aumento de capital, que comenzaría entre finales de septiembre y principios de octubre. Primero, los 90 millones ya ingresados por el presidente se convertirán, luego el texano, si se hace cargo, podría pagar tanto los 40 que faltan como los otros 45 que satisfacen las necesidades del Club.
En perspectiva, entonces, también pensamos en una «exclusión», es decir, la salida de la bolsa de valores, que actualmente ofrece más restricciones que ventajas. Blindando Zaniolo y Pellegrini en el mercado, en octubre procedería con la renovación de la Junta Directiva que expira, presentando a sus hombres de confianza empezando por su hijo Ryan.
La nueva presidencia también tendría la tarea al nuevo Director Deportivo (el sueño es Paratici) y el hombre que trabajará junto a Bruno Conti en la gestión del sector juvenil. Luego, el nuevo patrocinador técnico que tomará el lugar de Nike. El balón está actualmente en manos de Pallotta, que esperará el resultado de la Europa League. Si llega un triunfo (histórico) y una calificación a la Liga de Campeones, la historia debe reescribirse, así como el valor de la Roma.
