Con tres salidas ya definidos y otros en proceso de cierre, la Roma puede empezar a hacer cálculos. El próximo mercado de fichajes podría generar unos 100 millones de euros en ganancias. Una cifra significativa que permitirá a Ghisolfi conformar una plantilla acorde con las necesidades de Gasperini. El nuevo entrenador ya ha definido sus prioridades: al menos cuatro refuerzos, incluyendo dos jugadores de banda, un central y un delantero con características funcionales para su juego vertical.
Sin embargo, hay un plazo ajustado: antes del 30 de junio, el club giallorossi deberá obtener plusvalías para cumplir con los parámetros del Fair Play Financiero. Zalewski (a falta de oficialidad )fue fichado por el Inter por 6,5 millones, Dahl fue vendido al Benfica por 11, Angeliño pudiera ir al Al-Hilal por 25 millones: el acuerdo se hará oficial en los próximos días. El Sunderland también hizo su parte, tras activar su obligación de comprar por Le Fée. Total hasta el momento: entre 65 y 70 millones cuenta este domingo Gianluca Piacentini en Il Corriere della Sera.
El resto deberá provenir de traspasos aún por definir. Las situaciones más delicadas afectan a Hermoso (podría ser vendido a Alemania y España), Kumbulla y Abraham (el jugador más atractivo). Luego están los traspasos menores: Solbakken está a punto de marcharse y el objetivo es cobrar entre 4 y 5 millones, además de Darboe, que gusta al Cremonese y al Pisa. Los jóvenes Pagano y Cherubini serán evaluados en la pretemporada, al igual que Oliveras.
