Hoy comienza «una nueva temporada» para la Roma. 18h00, todas las miradas puestas en Bologna. Contra los hombres del Italiano, Claudio Ranieri tendrá que romper el tabú de jugar como visitante y aprovechar el entusiasmo post al derby. Pero la mayor parte de la atención se centra en el mercado y en las negociaciones por Davide Frattesi. Es el gran objetivo para enero, escribe Marco Juric en La Repubblica. El hombre clave para el cambio de ritmo en el centro del campo.
Y así, los Giallorossi están inevitablemente divididos entre el campo y las negociaciones. El lunes pudiera tener lugar la primera reunión real entre Roma e Inter para intentar cerrar el acuerdo. Las partes se reunirán para discutir cifras y consideraciones concretas. En los últimos días tuvo lugar en Milán un encuentro entre el director deportivo giallorossi Florent Ghisolfi y Giuseppe Riso para estudiar la mejor propuesta para presentar a los nerazzurri. La operación se dividirá en dos partes: la primera se referirá al traspaso definitivo de Davide Frattesi, mientras que la segunda involucrará a Bryan Cristante. Pero procedamos en orden.
La Roma presentará una oferta económica cercana a los 30 millones de euros, probablemente en cesión con obligación de compra y pago plurianual. Una cifra alejada de las peticiones iniciales del Inter (45 millones), pero en línea con la valoración que los giallorossi tienen del jugador. El centrocampista ya le ha comunicado a Inzaghi y al club nerazzurri que quiere marcharse. Y dio su visto bueno para el traslado a la capital. La de la Roma será la primera oferta concreta que llegará a la mesa de Marotta, ahora consciente -aunque ciertamente no contento- del deseo de Frattesi de irse. El Inter no se opondría a su traspaso a la Roma, sobre todo con la sombra del Nápoles que sólo espera el traspaso de Kvaratskhelia al PSG para presentar su oferta.
El interés de la Roma por Frattesi en cada ventana de fichajes se ha convertido en un clásico. Un poco como el film ‘Trading Places’ en Nochebuena, parece que nadie puede prescindir de él. Pinto lo había intentado sin éxito en los últimos años, ahora es el turno de Ghisolfi de intentar traer a casa a un «hijo de Roma», escribe Daniele Aloisi en Il Messaggero. Davide no está contento con el poco espacio que está encontrando esta temporada y su mal humor se ha notado tanto en Inzaghi como en el club.
Por este motivo abrió la puerta al traslado a la capital. En Milán hubo una reunión entre las partes y el Inter está a la espera de la primera oferta oficial. La valoración es de 45 millones y la Roma actualmente no tiene ese dinero para poner sobre la mesa. Ausilio no cierra las puertas a los Giallorossi y podría incluso bajar un poco el precio. Una historia diferente para el Napoli. Conte lo aprecia mucho, pero el Inter no tiene intención de reforzar a un rival para el Scudetto. La próxima semana será la que dé lugar a la primera oferta y hay dos vías: la primera es proponer un préstamo oneroso con obligación de reembolso, mientras que la segunda es la de un pago diferido en varios años. No se descarta la posibilidad de incluir a Bryan Cristante en préstamo. La idea, sin embargo, todavía no convence al Inter que, en caso de que Frattesi salga, querría centrarse en Ricci del Torino.
Dato curioso: ayer cuando el Inter partió rumbo a Venecia y Frattesi fue protagonista de un sketch. Un fan estalló en lágrimas y le pidió que se quedara. La abrazó y luego le dijo: «No hables, hay cámaras». Con los nerazzurri no sólo se habló de Frattesi, sino que la Roma también pidió información sobre Buchanan. Incluso en este caso la negociación está lejos de ser sencilla. El Inter ha dejado claro que no quiere dejarle sale en préstamo.