Veinticuatro goles y ganas de marcar el primero ante el Leicester para ayudar a la Roma a llegar a la final de Conferencia. La de Tammy Abraham ha sido una temporada más que positiva hasta el momento, la primera en los Giallorossi. Ciertamente no es la última.
El inglés es, de hecho, la estrella guía del proyecto de tres años de Mourinho. Por ello, se rechazará cualquier tipo de oferta por complicada que sea el derecho del Chelsea a recomprar a Abraham por 80 millones pero solo a partir del verano de 2023. Una hipótesis remota dadas las dificultades de Abramovic provocadas por la invasión de Rusia en Ucrania. El Arsenal, a la caza de un delantero, intentó acercarse a Tammy (consideradao el 1ª en la lista de Arteta) que rechazó incondicionalmente cualquier oferta de los Gunners. Y el Manchester United también se hizo oír con el ex agente del Chelsea.
El número 9 lo pasa muy bien en Italia y quiere ganar con Mourinho y la Roma antes de volver a Inglaterra. Otro elemento que ayuda a la permanencia de Tammy en Roma viene de parte de su agente Neil Fewings. Fewings, durante la firma del contrato, aceptó la inclusión de una comisión que le permite cobrar un porcentaje, que depende de la duración de la estancia de Abraham en el club giallorossi: tras el mercado de fichajes de enero cobró los primeros 400.000 euros, y obtendrá una cifra similar al final de la sesión de verano. Esta bonificación también se mantendrá en los años siguientes, en caso de que el inglés permanezca en el equipo de Mourinho.
