La Covid sacude a la Roma una vez más. Ayer, el equipo se volvió a Trigoria para el ciclo de exámenes moleculares posteriores a las vacaciones. Pruebas que dejaron un positivo, que está bien y en aislamiento pero prefiero mantener su identidad en el anonimato según comunicó el club.
Tras el último partido, ante la Sampdoria, Mourinho había deseado «tener a todo el mundo disponible para la vuelta en enero menos a Spinazzola, esperando que no haya situaciones relacionadas con el virus». Con los resultados de las pruebas, ya vemos que no fue tan mal como le ha ido a otros equipos al rededor de Europa.
Según Corriere dello Sport el problema no menos preocupante es que se trata de un jugador, titular, que ha optado por no vacunarse. Con la entrada en vigor del nuevo decreto, ya no podrá jugar a partir del 10 de enero si no cuenta con el pase verde reforzado, que se obtiene con vacunación o recuperación de Covid. Sobre este punto el Gobierno no admite excepciones. Y así la Roma se está preparando para diversas eventualidades. Teóricamente, este jugador, cuyo nombre no se menciona por respeto a la privacidad, podría optar por iniciar el ciclo de vacunación, lo que le daría un pase 15 días después de que se haya inoculado la primera dosis.
De esa forma no perdería ni un solo partido. Alternativamente, y tras entrar en contacto con el virus, volvería a jugar hasta que finalice la emergencia sanitaria. En ese momento, sin embargo, la Roma, siendo un jugador importante, debería plantearse el problema de una sustitución en el mercado. Sin descartar un recorte salarial, como sucedió en noviembre en el Bayern de Múnich cuando Kimmich, Gnabry y otros jugadores no vax fueron sometidos a la disposición (Kimmich anunció entonces que quería vacunarse). En estas horas, los entrenadores, con la ayuda del departamento legal del club, están estudiando la situación y luego evaluando cómo moverse.
