A pesar de la alerta lanzada sobre muestras de antisemitismo que caracterizó la víspera, el derby entre Lazio y Roma terminó sin incidentes significativos, aunque hubo algunos momentos de tensión cuenta este lunes el diario La Reppublica.
La situación más crítica se produjo poco antes del inicio del partido cuando los dos aficiones se enfrentaron a distancia dentro del Estadio Olímpico. Se produjeron frecuentes lanzamientos de objetos, bombas de humo y petardos entre los aficionados de la Roma en la Curva Sud y los hinchas de la Lazio en la grada sur, cerca de las ventanas divisorias. Durante los enfrentamientos, un aficionado de la Lazio resultó herido en la mano al intentar lanzar un petardo. Su estado, sin embargo, no es motivo de preocupación.
Sin embargo, hacia las cinco de la tarde, hinchas de la Roma hicieron estallar algunas bombas de papel cerca del bar River, punto de encuentro de los ultras giallorossi, lo que también provocó un lanzamiento de botellas y petardos contra los policías antidisturbios, que no reaccionaron a la provocación. En la mañana, sin embargo, los sectores más extremos del tifo corrieron el riesgo de chocar en el Lungotevere, cerca del Ponte Milvio, donde se reúnen los ultras de la Lazio. Sobre las diez de la mañana, un gran número de agentes policiales patrullaban la zona y fueron alertados al ver a un grupo de aficionados encapuchados y armados con palos.
