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El ambiente creado en el Olímpico por los más de 60 mil hinchas de la Roma ante el Athletic da la vuelta al mundo; banderas amarillas y rojas agitadas por más de diez minutos ininterrumpidamente

El objetivo era crear una atmósfera espeluznante y el resultado fue genial. En los últimos días, la Curva Sud había invitado a los aficionados a acudir al estadio con una bandera amarilla y roja. Y la semana pasada fueron atacadas las tiendas que vendían telas en la capital se lee este viernes en el diario Il Messagero.

Los más de 60 mil, pues, empezaron a colorear el Estadio Olímpico. Un espectáculo que ha dado la vuelta al mundo y que también fue filmado por aficionados del Athletic Bilbao. Literalmente un muro amarillo y rojo, todos habían traído una bandera. El momento del himno de Antonello Venditti fue emocionante.

La afición, según informó Sud, agitó sus banderas hasta el minuto 10 del primer tiempo. En 6 días la Roma volará a Bilbao para el partido de vuelta. San Mamés también está dispuesto a encender el ambiente. Pero como decía Dybala: «El Olímpico tiene una magia increíble. Hay pocos estadios como éste».


Espectáculo giallorossi en las gradas del Olímpico. El partido ante el Athletic se esperaba que fuera apasionante desde el punto de vista de la afición y así lo fue. En los días previos al partido, la Curva Sud había convocado a todos los aficionados presentes en el estadio para crear una escenografía inédita cuenta por su parte el diario Il Tempo.

Las 62.540 personas presentes ayer respondieron con entusiasmo: una marea amarilla y roja invadió las gradas, siguiendo unas reglas sencillas y claras. Una bandera sin logotipos, solo con los colores de la AS Roma, completa con nombre. Las gradas ya habían empezado a teñirse de amarillo y rojo en las horas previas al partido, pero fue durante el calentamiento cuando los aplausos realmente cobraron vida. Las primeras banderas comenzaron a ondear, acompañadas de cánticos de aliento para los jugadores en el campo.

A medida que se acercaba el inicio del partido, el volumen de las ovaciones aumentaba, al igual que el número de banderas ondeantes, hasta que se leyeron las alineaciones. El momento culminante del espectáculo fue cuando los equipos entraron al campo, cuando todo el estadio siguió al pie de la letra las instrucciones de la Curva Sud.


Los hinchas mas fieles, ubicados en la Curva Sud, alentaron ademas al equipo cantando viejos coros de los 80 a tono con el espectáculo de las banderas que también es retomado de aquella época ochentena donde el tifo organizado romanista sirvió de inspiración y fue precursor en toda Italia. En la Curva se leyo una pancarta que decía:«Finché vedrai… Mientras veas…». Asiendo alusión a un coro de la epoca que invita a ondear las banderas y que habla del amor del hincha por la Roma.

Aqui todo el coro:»Questa sera parto subito, prendo il treno delle undici, il biglietto non ce l’ho…. Caricherò! Finchè vedrai sventolar questa bandiera, siamo gli ultras della Roma e per sempre canterem!».

Traducción:» Parto de inmediato esta tarde. Tomo el tren de las once, no tengo entrada… ¡Apoyare! Mientras vea esta bandera ondear, “¡Somos los ultras de Roma y cantaremos siempre!”.

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