Detrás de los cristales tintados del coche, Paulo Dybala, llego hasta Trigoria en el lado del pasajero, lanzó una enorme sonrisa a los aficionados que se presentaron ante el Fulvio Bernardini para recibir a los jugadores en el primer día del encuentro. El as argentino, una vez que pisó la sede del club Giallorossi, fue recibido calurosamente por Daniele De Rossi, allí con besos y abrazos, y luego saludó por primera vez a Florent Ghisolfi, el nuevo director deportivo. Un apretón de manos que tiene millones de significados. Sí, porque puede servir como aperitivo de lo que podría pasar dentro de unas semanas, quizás con un nuevo contrato firmado y otra gran sonrisa como esa.
Aún no se ha programado una cita. Dybala está jugando a sus cartas con la Roma. No hay ninguna estrategia bajo la mesa, teniendo en cuenta que desde hace unos días está activa la cláusula de 12 millones para clubes extranjeros, que de ninguna manera quiere activar. Cuando sus agentes se sientan por primera vez alrededor de una mesa, se reiterará un concepto ya claro: el entorno del ’21’ pretende proponer a Ghisolfi extender el contrato actual a lo largo de varios años. Esta temporada el salario de Dybala aumentará hasta los 7,5 millones más 2 millones en bonus. Una suma enorme que podría pasar a formar parte de los honorarios de la Roma en un acuerdo más largo.
Aún no se ha decidido el día preciso para iniciar las negociaciones propiamente dichas, pero se parte de una doble premisa: continuar juntos. Dybala, de hecho, se puede ver en Roma incluso después de su boda (20 de julio) y De Rossi planea ponerlo en el centro del proyecto con su juego y su clase para atacar en su regreso a la Champions.
Ademas agrega el diario Tuttosport que Dybala no parece particularmente tentado por la posibilidad de ir a jugar a Arabia Saudita, a pesar de la rica oferta de Al Nassr. La cláusula de rescisión de 12 millones (válida para clubes extranjeros) sigue vigente hasta el 31 de julio. Para esta semana está prevista en la capital una reunión entre los agentes del mediapunta Carlos Novel y Jorge Antun con el director Ghisolfi: un cara a cara que promete ser decisivo para entender cuál será el futuro de Dybala, considerado intransferible por el técnico De Rossi.