La Roma inauguró este miércoles el nuevo año con un entrenamiento abierto a los aficionados en el estadio Tre Fontane. Entre los aficionados presentes se creo cierta preocupación cuando Artem Dovbyk no entró al campo junto al resto de sus compañeros.
El jugador ucraniano, según los reportes del diario Il Romanista, siguió la sesión al margen junto a Bryan Cristante y Mathew Ryan quienes se ejercitaron de manera individual. En los últimos días ya se le había establecido un programa de trabajo individual en el gimnasio. La situación de Dovbyk será objeto de seguimiento en los próximos días, pero no parece haber preocupaciones sobre un largo tiempo de recuperación y su presencia en el derbi contra la Lazio del 5 de enero no está en duda.
A partir de mañana el ex del Girona debería volver a entrenar con normalidad junto al resto del equipo en Trigoria para preparar mejor el gran partido del fin de semana ante la Lazio.