Este domingo en la mañana, una unidad de las fuerzas especiales del ejército guineano liderada por el coronel Doumbouya irrumpió en el distrito presidencial de la capital, Conakry, logrando secuestrar al presidente Alpha Condé.
Según los informes del diario francés L’Equipe, la selecciones de Guinea y Marruecos, que debían enfrentarse mañana para las eliminatorias del Mundial de Qatar, están aislados en un hotel y en total seguridad a 3 kilómetros del palacio presidencial. La delegación marroquí, según el rotativo galo, aún no ha logrado salir del país.
El coronel, líder de los insurgentes, anunció en la televisión nacional la disolución del gobierno y de todas las instituciones. Las federaciones de Guinea y Marruecos están a la espera de las comunicaciones de la FIFA sobre el partido que podría disputarse de todos modos, pero haciendo que la selección de Hakimi y sus compañeros sean los locales, invirtiendo así el calendario. La situación se está desarrollando. La directiva romanista también están preocupados porque Amadou Diawara está entre los jugadores del conjunto de Guinea.
