Eusebio Di Francesco, entrenador de la Roma desde el verano de 2017 hasta marzo de 2019, habló en una larga entrevista con el diario español Marca, repasando su experiencia de casi dos años en el banquillo de los giallorossi. El técnico se centró en el inolvidable 3-0 ante el Barcelona en los cuartos de final de la Champions League el 10 de abril de 2018 y luego recordó la relación con Zaniolo para hablar tanto de los partidos como de los motivos que llevaron a su despedida a favor de Claudio Ranieri . Aquí están sus palabras:
“Yo creía en la remontada. Pensaba que era posible porque, a pesar del 4-1 de la ida, hicimos un gran partido. Elegí hacer un partido muy agresivo. Ahora parece fácil decirlo, pero todos creyeron en la remontada. Recuerdo que en el 3-0 de Manolas todo el mundo festejaba y yo daba indicaciones. Florenzi me miró y me dijo ‘mister, no me lo creo’, así que traté de mantener la tensión alta. Los únicos tiros a puerta que recibimos fueron en los últimos cuatro minutos. Fue una proeza, pero, riéndome, siempre digo que esa proeza me trajo mala suerte. Casi parece que me castigó el destino después de es partido”.
Sobre Nicolo Zaniolo.
«El equipo estaba desmotivado y estaba este chico que mejoraba entre entrenamiento y entrenamiento. Una vez lo regañé delante de todos y reaccionó con una determinación impresionante. Opté por darle un premio y demostrarle mi confianza, sentí que podía convertirse en un jugador importante y lo hice debutar en el partido mas difícil, la lesión que tenia le dolió, no se ni quiero saber por que termino así en la Roma, pero seguro que todavía esta a tiempo de demostrar su valor».
Derby, Oporto y vestuario.
«Tuve la suerte de ganar unos cuantos derbys y la derrota en el último, junto con la eliminación con el Oporto, provocaron mi despido. Era un momento complicado: tuve una pelea con algunos jugadores, no diré quiénes, en una manera difícil. Moralmente, no me ayudó, no me gustó lo que estaba pasando «.