Arranca desde el centro del campo para acompañar el contraataque, pase recibido en el borde del área, control y zurdazo certero al arco. Gol, carrera hacia los compañeros y celebración con la lengua fuera a lo Del Piero. Un partido inolvidable para Tommaso Baldanzi, que entró dos minutos antes del gol que decidió la victoria del Empoli contra el Inter en San Siro. A partir de ese día, toda Italia y Europa descubrieron realmente las cualidades de aquel joven de diecinueve años que emergía de uno de los sectores juveniles más importantes de la Serie A.
Era su cuarto gol en el campeonato, una perla que cambió su temporada y lo lanzó hacia sus sueños: convertirse en un futbolista profesional en todos los sentidos y soñar con algún día vestir la camiseta de un club de primer nivel. Le tomó un año llegar a ese objetivo. Fue el 23 de enero de 2023 cuando marcó en San Siro, fue el 31 de enero de 2024 cuando llegó a Roma para comenzar su aventura con los Giallorossi. El pasado lunes debutó en el Olímpico ante el Cagliari, pero con el resultado ya en el bolsillo, Tommaso ya está preparado para enfrentarse al Inter al que ya venció una vez más. Esto es lo que espera: entrar al campo en la segunda parte y poder volver a impactar el marcador con un gol fuerte asegura Jacopo Aliprandi en el Corriere dello Sport.
Sus primeros nueve días en Trigoria han sido ciertamente especiales. Tímido fuera del campo pero ya emprendedor en él. Al fin y al cabo, pasar de Empoli a Roma es un paso importante. Para todo: ciudad, centro deportivos, jugadores, presión. Es todo más. Y para un chico que vive en la ciudad toscana desde que tenía ocho años, las cosas no pueden resultar fáciles en un principio. Se está adaptando bien y De Rossi quiere esperarle para no desmoralizarle, pero sobre todo le quiere en perfecta forma física antes de empezar. Por esta razón, Tommaso tendrá más minutos en el campo mañana y luego en los próximos partidos hasta que esté listo. Sólo mira al mañana, por tanto al Inter y a ese sueño que espera volver a hacerse realidad.