Hace un mes ya y en la jornada del Roma-Milan de la vuelta de los cuartos de final de la Europa League se inicio con la noticia de la renovación del contrato de Daniele De Rossi. En un comunicado publicado en el sitio web oficial, los Friedkins anunciaron que «después de una reunión con Daniele De Rossi, les complace anunciar que seguirá ocupando el cargo de entrenador de la AS Roma también al final de esta temporada. y para el futuro cercano«.
La Roma y De Rossi se dieron la mano, el club decidió apostar en él para un proyecto a largo plazo y el técnico está feliz de poder continuar en la que considera «su casa». Como explico Sky Sport en su día, comenzarían poco después, las verdaderas negociaciones, como las económicas, la duración del contrato y el salario, hasta que todo quede en blanco y negro, ahora a llegado ese momento.
De hecho según cuenta Gianluca Di Marzio en su web, Daniele De Rossi está listo para firmar oficialmente el contrato que le unirá a la Roma hasta junio de 2027. A pesar de un sexto puesto en el campeonato y de la eliminación en las semifinales de la Europa League, los Friedkins quieren centrarse en él para iniciar un proyecto concreto, como lo demuestra también la llegada de un director deportivo muy joven como Florent Ghisolfi. En las próximas horas lo más probable es que llegue también el anuncio oficial del club Giallorossi con un comunicado de prensa.
El nuevo contrato y su estructura
La hipótesis que se estudia es la de un acuerdo complejo, quizás estructurado sobre una base fija y sobre incentivos vinculados a los resultados deportivos. Un modelo contractual que no es nuevo para De Rossi, que para sustituir a José Mourinho había aceptado condiciones similares en enero por una suma básica de 400.000 euros, enriquecida con una importante bonificación ligada a la clasificación para la próxima Liga de Campeones.
Seguramente será fácil entenderse, también porque club y entrenador podrán pensar en una plantilla que ha aumentado significativamente su valor en los últimos tres meses. Y para alguien que en enero había pedido a los Friedkins y a todo el entorno que lo trataran sólo como entrenador y no como leyenda del club, será fácil decidir rápidamente y sin compromisos: por el bien de la Roma.
