Dos charlas para agradarse y prometerse el futuro.
El flirteo entre Maurizio Sarri y la Roma comienza a convertirse en algo más serio, escribe Francesco Balzani en el diario Leggo. Los Friedkin, de hecho, se habrían reunido con el ex entrenador de la Juventus al menos dos veces y habrían encontrado plena disponibilidad.
No hay acuerdo preliminar claro, pero sí un saludo que sabe mucho a una propuesta de matrimonio de tres años a razón de 5 millones. Por otro lado, el destino de Fonseca parece sellado y hay quienes juran que ni la hazaña de ganar la Europa League lo mantendría en el banquillo.
El ‘sueño Allegri‘ está destinado a seguir siéndolo, a menos que Max decida aceptar inmediatamente la propuesta de la Roma, propuesta que no se ha hecho y sobre la que las partes no se han vuelto a poner en contacto. Las opciones extranjeras son casi imposibles (Nagelsmann estaría esperando por el Real y Conçeicao tiene un pasado incómodo con demasiadas incógnitas).
La candidatura de Sarri, en cambio, no presenta complicaciones. Tiene experiencia en grandes plazas de Italia, le gusta la plantilla actual, no esperaría de inmediato un mercado sustancial y tendría tiempo para reconstruir en Trigoria ese laboratorio de talentos para modelar como lo había hecho en Nápoles.
Al desplazarse por los nombres, surgen muchos funcionales a su 4-3-3. En defensa necesitarían un lateral (Hysaj) y probablemente otro central (¿Maksimovic?) Además del portero, que podría ser Gollini. En el centro del campo, Pellegrini y Veretout serían los medios con Villar como mediapunta a lo Jorginho, mientras que en ataque sonreirían El Shaarawy, Zaniolo y Pedro, que marcó 13 goles con Sarri en el Chelsea y fue decisivo para la victoria de la Europa League.
El técnico napolitano (que creció en Toscana) aportaría su entrenamiento atlético: entrenamientos más largos e intensos. Algo que compone varios de los aspectos que muchas veces se le reprochan a Fonseca.
.RPR.