Este miércoles la Roma y la afición recuerdan la muerte del presidente Dino Viola. Han pasado 31 años desde la muerte del histórico presidente giallorossi quien estuvo al frente del club de 1979 a 1991.
En sus 11 años y ocho meses de presidencia el equipo logró el campeonato 1982/83, tres segundos puestos y cinco Copas de Italia (1979/1980, 1980/1981, 1983/1984, 1985/1986 y 1990-1991). Sus entrevistas son memorables, como la que ofreció a final de la Copa de Campeones perdida en los penaltis ante el Liverpool en 1984: «La Roma nunca ha llorado y nunca llorará: porque los débiles lloran, los fuertes nunca lloran». El club giallorossi lo recordó hoy en las redes sociales, junto a muchos giallorossi.
La Roma se volvió grande e incluso “mágica” con Dino Viola como presidente. Padre más que maestro como lo consideraban los jugadores que salían al terreno de juego como Falcao y Pruzzo, Bruno Conti y Di Bartolomei, Tancredi, Nela y en el banquillo el Barón, Neils Liedholm. Y cuántos otros nombres se podrían mecionar, pero hay que mencionar otro: Maurizio Turone. Uno de sus goles fue anulado en un partido ante la Juve, desde ese momento Turone y su gol se volvieron el emblema de todo, fue el símbolo de Viola en la lucha contra el norte que caracterizó su larga época presidencial.