Defiende como un petroniano, arma el juego como un mediapunta y, cuando se acomoda en el área rival, marca como un delantero. Novena aparición en Liga y tercer gol, siempre de cabeza, siempre importante. Es imposible encontrar un defensa central hoy al mismo nivel e impacto que Chris Smalling en la Serie A. Con el Lecce, el penalti de Dybala decide el desafío y le da tres puntos a Mourinho, pero el aporte del central giallorossi vuelve a ser decisivo. Un recurso inesperado en el inicio de la temporada, un referente para la defensa y un frío goleador en los balones altos según cuenta este lunes el diario La Reppublica.
Y la comparación con el departamento ofensivo es casi inquietante: excluyendo a Dybala, son los giallorossi los que más anotaron. Pinceles de Pellegrini, partituras de Smalling: se está convirtiendo casi en un esquema para la Roma de Mou. Primero el gol ante Cremonese en el Olímpico, luego el extraordinario remate en San Siro y anoche el cabezazo para desempatar ante el Lecce.
“Es extraño que no esté en la selección inglesa. Estoy en una posición privilegiada para compararlo con el Smalling de hace 5 años: no sé, quizás sea la alegría de vivir aquí, de estar en Roma, de sentirse bien… no sé. Puedo decir objetivamente que es un jugador de altísimo nivel con mucha experiencia y estabilidad”.
El pensamiento de Mourinho subraya entonces la paradoja que sigue viviendo el central del Greenwich: entre los mejores defensas de la Serie A, por goles y rendimiento, es ignorado por Southgate. La visita al Dacia Arena del técnico inglés ni siquiera fue demasiado afortunada, dados los cuatro goles encajados por los giallorossi, pero el resto de impecables actuaciones parecen un asunto más que fiable para reservarle un puesto entre las convocatorias del Mundial de Qatar.
