Daniele Chiffi, arbitro de la Serie A, concedió una entrevista al diario romano Corriere dello Sport hablando también de lo ocurrido con José Mourinho durante el partido Monza-Roma de la temporada pasada. El convulso episodio tuvo lugar el 3 de mayo de 2023, tras el empate entre Monza y Roma se vieron las frases (entre ellas «el peor árbitro de mi carrera», «tenía un micrófono oculto para protegerme») que le costaron a Mourinho una multa y la sanción de dos fechas en el inicio de la nueva temporada.
El colegiado ya había tenido conflictos con Chiffi el 18 de septiembre de 2022: derrota de los giallorossi en el Olímpico ante el Atalanta, Mou expulsado y sancionado. ¿Qué queda de esas chispas?
“Mourinho es un gran entrenador, su historia habla por él y no me corresponde a mí juzgarlo. En el campo se puede discrepar, pero si el árbitro se da cuenta de las protestas aún con la ayuda del cuarto árbitro, la disposición debe llegar. Ser criticado es parte de nuestro trabajo, esa historia no me quitó el sueño. Si hubiera sucedido hace unos diez años, apenas cuando empezaba, no habría tenido la experiencia para manejar ciertas situaciones. Ahora no me puedo dejar influenciar, mi objetivo es hacerlo bien en cada partido y mejorar. Entonces, como en cualquier ambiente laboral no puedes estar de acuerdo en todo, es parte de la naturaleza humana. No tengo ganas de culpar a Mourinho, todos somos hombres de deporte y en el campo. En el momento en que tomas decisiones y estás convencido de que son correctas y tomadas con honestidad, no tienes problema alguno. Me miro tranquilamente en el espejo”.
¿Es un problema el exceso de protestas desde la bancada?
“Hay partidos que incluso antes de empezar llevan consigo historia y tensiones. La protesta en determinados momentos es parte del contexto y si un entrenador ve algo que no le convence, está realmente inducido a reaccionar. Lo importante es que te mantengas en el camino, que dura esos cinco segundos. Luego volvemos a la tranquilidad con respecto a los roles. Cada uno hace lo suyo, el árbitro a veces se ve obligado a tomar decisiones impopulares: sería un error no hacerlo y el fin de nuestro papel. Yo también me critico, uno debe ser autocrítico al revisar los episodios. Miro toda la carrera porque me da ideas, la reviso y reflexiono sobre lo que hubiera sido mejor hacer. A veces nos equivocamos porque no anticipamos la lectura del partido o estamos mal colocados”.
¿Qué cambia este año?
“No hay cambios normativos sustanciales, solo algunas aclaraciones, disposiciones y recomendaciones como las relativas a las personas externas que pueden entrar en el terreno de juego en caso de gol. El gol será anulado si la presencia en el terreno de juego influye realmente».
¿Qué temporada se viene?
“El Var es una protección para todos. Cuando no alcanzamos con la vista o estamos mal posicionados, contamos con una herramienta que nos permite corregir la decisión equivocada restaurando la verdad del campo. Los equipos están contentos porque se sienten protegidos y nosotros porque no impactamos. Empezamos el séptimo año con el Var, fuimos los primeros en presentarlo y cada año queremos aprovecharlo al máximo”.
¿Puede el Var ser demasiado intrusivo?
“El objetivo es corregir el error, se espera que la intervención se dé cuando sea necesaria una evaluación sabiendo que hay un protocolo a respetar”.
¿Ha cambiado algo en la actitud de los jugadores sobre las decisiones arbitrales?
“Entendieron la línea de intervención. Los jugadores saben en qué situación interviene el Var. La protesta es fisiológica en determinadas situaciones, pero las reglas se conocen. En general vamos hacia un juego más correcto. Si alguien engaña, todavía hay una herramienta que restaura la verdad. Estas actitudes están desapareciendo, quedan casos aislados”.
¿Son útiles las reuniones con entrenadores y jugadores?
“Son útiles porque trabajar juntos te permite decirte cosas y discutir cosas. La comparación es bienvenida para escuchar también lo que los jugadores esperan de nosotros, en un momento de agregación entre sujetos que forman parte de un mismo sistema. El conocimiento acorta la distancia”.
¿Los tiempos de recuperación aumentaran mucho en la Serie A, esto nos hará revivir los tiempos bíblicos de la Copa del Mundo?
“Solo se aclaró que los festejos deben contarse en el agregado”.
¿Los árbitros italianos siempre en lo más alto?
“Viniendo del atletismo, estoy acostumbrado a mirar mi patio trasero y no lo que hacen los demás. En todo caso, trato de mejorar inspirándome en el exterior. Tenemos una gran tradición en Italia, con instructores de muy alto perfil. A nivel UEFA todo el mundo estudia a todo el mundo, el mayor error es sentirse el mejor. Si crees que lo eres, inconscientemente corres el riesgo de establecerte. Tengo hambre de futbolista, filtrada por otro rol. Hay que buscar las decisiones, no hay que esperar a que sucedan las cosas para luego ir tras los acontecimientos”.
¿Cuál es el porcentaje de jugadores que definirías correcto?
“Más del 90 por ciento son correctos. Por lo demás, no hablaría de tipos injustos sino de actitudes. Nos toca a nosotros, con decisiones uniformes a lo largo del campeonato, hacer la aportación adecuada: si conseguimos transmitir la sensación de que las decisiones son homogéneas, incluso los jugadores se autorregulan y evitan determinados comportamientos”.