Artem Dovbyk sigue siendo monitoreado. El delantero ucraniano, ex del Girona, corre el riesgo de regresar antes de tiempo a Roma desde la concentración de la selección ucraniana por un problema en la rodilla. De hecho, el número 11 de los Giallorossi no entreno ayer según cuenta La Gazzetta dello Sport con su selección y el cuerpo médico de Ucrania y Roma están valorando estas horas. un pronto regreso a la capital.
Después del partido contra el Bologna, Dovbyk se sometió a una resonancia magnética que no reveló ningún problema particular y pudo respirar aliviado, hasta el punto de que quiso responder a la convocatoria de su selección. Problema similar también en la parada anterior: es que Dovbyk lleva un tiempo sufriendo en su rodilla (la misma operada de una lesión del ligamento cruzado en la temporada 2018/19), sobre todo por el desgaste del cartílago que lleva a estados inflamatorios, especialmente si están bajo tensión continua. Un problema molesto que hay que gestionar, entre descanso y fisioterapia, con el que el ucraniano tiene que convivir, pero no tan debilitante como para comprometer su terreno de juego. Eso sí, los muchos minutos a los que ha sido sometido desde inicio de temporada no habrá jugado a su favor. De hecho, Artem ya ha alcanzado los 1.150 minutos de juego esta temporada.
Ahora Ranieri tendrá que pensar detenidamente su utilización aunque el ucraniano sigue siendo muy titular también para el nuevo técnico, tanto por la inversión como por las pocas alternativas disponibles en la plantilla. Cabe señalar que Mancini también pasó por el Campus Biomédico en los últimos días para una radiografía de tórax tras una contusión que también sufrió con el rossoblù, pero ya se ha recuperado.