En una larga entrevista con el diario deportivo Corriere dello Sport, Hassem Aouar contó su historia, analizando también sus primeras impresiones y sus primeras semanas en el mundo giallorossi. Estas son sus declaraciones:
¿Qué objetivos se ha marcado Aouar?
“Quiero que la afición se sienta orgullosa de mí y del equipo. Para complacerles tenemos que luchar por la camiseta y dar espectáculo en el campo, intentando ganar todos los partidos. La ambición está ahí pero todo compromiso hay que vivirlo con humildad».
Dicen que le debe todo a su madre.
“Y la verdad, el apego es fuerte. Ella nació en Argelia, mi padre en Francia. Pero fue mamá quien me crió a mí ya mis dos hermanos mayores, trabajando duro como enfermera. Me enseñó los principales valores: ante todo el respeto. Para mí, la mayor felicidad es saber que hoy ella está orgullosa de mí».
¿Y qué piensa su padre?
«No quiero hablar de él».
Vayamos más allá. Cuando juegas al fútbol y eres francés de origen argelino, el modelo a seguir es necesariamente Zinedine Zidane.
“Zidane era único, inimitable. Nunca llegaré a su nivel. Pero claramente es mi futbolista favorito por su técnica y elegancia».
La Roma estaba en su destino: uno de sus mentores en el Lyon fue Clement Grenier, quien vivio en Trigoria durante seis meses en 2017.
“En realidad, la coincidencia es extraña. Clement fue muy importante en el Lyon porque facilitó mi transición al equipo cuando era joven. Él, que ya era un futbolista consagrado, me ayudó y protegió. No lo olvido».
Grenier como socio, Rudi García como entrenador. ¿Qué te dijeron de Roma?
“Obviamente nos enviamos mensajes de texto los días en que estaba negociando con el club. Según ellos lo disfrutaré. Me describieron un lugar magnífico donde la afición es extraordinaria. Debo reconocer que ya lo he notado: en la calle tienes la sensación de que toda una ciudad sigue el fútbol y apoya a la Roma. Esto me convence de que he elegido bien. Ahora quiero devolver la confianza que se ha depositado en mí”.
Aquí: ¿quién le convenció para fichar por la Roma?
“Mourinho fue fundamental: la oportunidad de ser entrenado por un fenómeno es imperdible. Y Tiago Pinto también hizo su parte porque demostró que realmente me querían. Pero déjame ser honesto hasta el final: cuando trabajas en Roma es más fácil convencer a alguien para que se una a ti. La Roma es la verdadera atracción”.
¿Es esta una etapa en su camino de crecimiento o un hito en su carrera?
«No. Sería un error considerar Roma un momento pasajero. Soy un tipo ambicioso y siempre he tenido como objetivo llegar a un gran equipo.Ahora estoy aquí y tengo que demostrar que lo merezco: quiero hacer grandes cosas aquí».
En su rol podría competir con Lorenzo Pellegrini, quien es el capitán.
«¿Porque? Siempre he pensado que los buenos jugadores pueden y deben jugar juntos. Lorenzo es uno de esos, será natural integrarse».
Con Mourinho por ahora está jugando con el 3-5-2, pero si también lo usaran en un mediapunta de dos hombres, ¿estaría a gusto?
«Ciertamente. Ya lo he hecho durante dos años. En un dúo siempre hay un jugador más físico y de calidad. Si el entrenador quiere, estoy disponible».
¿Quién es el compañero que más te impresionó en los primeros días?
“Son muchos… Pero ya los conocía, por fuera. Seguro que el talento de Dybala es especial, lo ves en cualquier entrenamiento. Pero el propio Lorenzo, o El Shaarawy hacen cosas increíbles”.
¿Y el compañero con la que pasas más tiempo?
“N’Dicka. Es normal, porque hablamos francés».
En enero participará en la Copa de África. Su decisión de abandonar la selección tras su debut con los colores de Argelia provocó discusiones en Francia.
“Este es un tema delicado que preferiría no abordar. Solo digo que estoy orgulloso de representar a Argelia. Y seguro que la Roma, que tiene una plantilla competitiva, me podrá ceder unas semanas».
