Cuatro son los riesgos, prácticamente uno por departamento. El Roma-Inter comienza ya ante Bologna, donde cuatro jugadores a una tarjeta amarilla de la suspensión estarán en el campo entre los Giallorossi. Todos nombres importantes. Precisamente por eso Mourinho no podrá conservarles de cara al partido del sábado ante el equipo con el que ganó el triplete.
Empieza por la defensa con Gianluca Mancini, el capitán de la última jornada ante la prolongada ausencia de Pellegrini. El enfrentamiento con el inquietante Arnautovic y el muy rápido Barrow eleva el listón de riesgo a niveles altos. Luego Rick Karsdorp, a menudo elogiado por Mou por ser capaz de ir más allá de la fatiga. El holandés tiene que jugar por una sencilla razón: no hay alternativas en su rol. En el mediocampo, el sospechoso de turno es Bryan Cristante, el único de los cuatro que pudo comenzar desde el banquillo ya que fue negativizado por Covid apenas anoche. Finalmente el nombre más pesado: Tammy Abraham.
El inglés, que acaba de marcar tres goles en dos partidos, tendrá que tener cuidado de no perderse el partido ante Skriniar y sus compañeros. Máxima atención, por tanto, también porque mirando los precedentes y el trío de árbitros no hay necesidad de estar seguro. De hecho, Pairetto dirigirá el partido en el Dall’Ara: estadísticamente, el silbante de Nichelino ha sacado 31 tarjetas amarillas en los siete partidos que ha arbitrado en la Serie A esta temporada. Casi un récord.
En el Var está Irrati que evoca terribles recuerdos (sobre todo en el derb) y quien amonestó a Veretout en Génova haciéndolo perderse el partido contra Torino. Esta temporada también amonestó a Pellegrini, expulsadole en medio de mil polémicas (y el comprensible enfado de Mou) contra el Udinese. Una descalificación que le costó estar ante Lazio.
via: Forzaroma.info