No solo Immobile, Milinkovic, Brozovic, Zielinski o Spinazzola. Hace unos veinte días, Arabia también llamó a la puerta de Lorenzo Pellegrini. Al Ittihad y Al Nassr, pertenecientes al área del Pif Fund (Fondo de inversión pública de Arabia Saudí que tiene al Newcastle en su círculo) han manifestado su interés por investigar la posibilidad de fichar al capitán de la Roma, escribe Stefano Carina en Il Messaggero.
La respuesta, sin embargo, fue clara: «No, gracias«. Su presente y futuro están en Roma. No se mueve. Lorenzo está listo para iniciar la séptima temporada tras su regreso a la capital. Se viene un año largo, lleno de expectativas que le llevarán a disputar la Eurocopa en junio. Los últimos momentos de la selección, los que Italia recuerda con agrado, los perdió ante… Roma. Sí, por no poder decir que no, en el derby de vuelta de hace tres años. Se la jugó, cuando debería haberse quedado en boxes, y su físico, ya maltratado por una temporada interminable, le pasó factura: lesión muscular y nos vemos en junio de 2024.
Lo compensó con la Roma, con Mourinho a la cabeza, ganando una Conference y acercándose a una Europa League. Sin embargo, en la última temporada ha estado por debajo de su nivel real. Ahora empieza de nuevo. Polémica, lesiones, seguimos adelante. La llegada de Aouar y la llegada de uno entre Renato Sanches (favorito) y Sabitzer son un estímulo. Lorenzo no le teme a la competencia.