Aunque el capitulo mercado de transferencias no está cerrado, o más bien debería estar oficialmente abierto, es razonable imaginar que Paulo Dybala permanecerá en la Roma. No Galatasaray, no cláusula, no fichajes a mitad de temporada cuenta este viernes Roberto Maida en el Corriere dello Sport.
Aquí viva la sinceridad: la Roma tenía previsto vender Dybala a Arabia en agosto, se disponía a dejarlo libre también en enero, pero ante indiscreciones que no se convierten en negociaciones cambiaron el plan de acción. ¿Podrá (debería) renovar el contrato del futbolista más talentoso y pagado? Lo hará sabiendo muy bien que Dybala también está dispuesto a discutir una nueva prórroga (2027) con un salario diferencial.
Después del doblete contra el Parma, el argentino pasó los festivos navideños en la capital italiana en compañía de amigos y compañeros (Paredes y Angelino) a la espera del partido fuera de casa contra el Milan que cerrará el «mes de la verdad» y ciertamente un 2024 poco apasionante para la Roma, escribe por su parte Lorenzo Pes en Il Tempo. Pero el nuevo año también podría estar teñido de amarillo-rojo para el argentino. Los numerosos rumores que sonaron en los últimos días para el atacante parecen haber desaparecido de repente. El interés del Galatasaray sigue vivo y el viaje de su agente a Estambul ciertamente no solo fue para admirar las bellezas de la ciudad turca. También ayer llegaron las palabras del técnico de los otomanos que alimentan algunas esperanzas de arrebatárselo a la Roma: “Es un jugador muy valioso. Todo entrenador lo quiere. Si estamos haciendo algo, tenemos que hacerlo en secreto», pero por ahora la idea de verle salir parece cada vez menos factible para su futuro.
El 1 de enero se activará la cláusula de 12 millones para quien quiera hacerse con los servicios de Dybala, escribe finalmente Gianluca Piacentini en Il Corriere della Sera, y por eso en Turquía, por parte del Galatasaray, están intentando acelerar el proceso. Sin embargo, cuanto más pasan los días, más parece que ‘La Joya’ permanecerá en Roma. Principalmente porque Dybala encaja bien con la Roma y con sus compañeros. En un puñado de partidos (dependiendo de cuánto avancen los Giallorossi en las copas, pero nada menos que 6 o 7), se le activará la prórroga automática hasta 2026, pero teniendo en cuenta el tamaño del salario (alrededor de 12 millones netos incluyendo el bonus) el argentino estaría disponible para repartir el salario ampliando el plazo y quizás bajando la cláusula de 12 millones. La propuesta de Trigoria aún no ha llegado, pero todavía hay tiempo (no demasiado) para decidir.
Además, este viernes en mesa de prensa Sir Claudio Ranieri fue bastante claro al respecto, sin rodeos dijo, una vez más lo que piensa como para evitar seguir dando largas a este tema en el futuro:»¿Si quiero que Dybala, Paredes y Hummels formen parte del equipo del futuro? Definitivamente. Así, sin rondeos.»