Han pasado casi tres meses desde la llegada de Mats Hummels y todavía no hemos visto nada del alemán. Sólo jugó 23 minutos en Florencia y marcó un gol en propia puerta. Además, desde el día de su llegada a Fiumicino, han cambiado tres entrenadores. Se esperaba que el exjugador del Borussia Dortmund estuviera disponible en 2/3 semanas tras no haber realizado ninguna preparación física durante el verano.
Ahora, ataque febril le impidió retomar los entrenamientos en estos días con la Roma, en la semana que habría servido para llamar la atención de Ranieri. Ni siquiera regresó a Italia, sino que permaneció en Alemania, donde pasó el fin de semana. Tampoco jugará en Nápoles asegura Corriere dello Sport. Y quién sabe cuándo tendrá una oportunidad. Porque su problema no es sólo que el termómetro suba de repente.
Juric no estaba loco si siempre lo mantenía fuera. En las ultimas horas trascendió que; la pruebas deportivas, pero también los entrenamientos observados de cerca, han revelado que Hummels aún no ha alcanzado el nivel de sus compañeros. Es muy difícil si aumenta la intensidad del trabajo. Ranieri, que fue el primero en preguntarse «¿por qué este chico no juega?», se dio una respuesta bastante rápida: el alemán no juega porque está en malas condiciones. Contra en Napoli de Conte, contra Lukaku, volverá a estar en el banquillo. Luego, ya veremos.
Recordamos que el contrato de Hummels expira en junio. Si no logra ganar espacio en Italia, en enero podría pedir regresar a la Bundesliga donde algunos equipos ya han explorado su disponibilidad. Por lo tanto la aventura de Hummels en la Roma podría estar ya en los créditos finales. En Alemania varios clubes están dispuestos a traerlo de vuelta a la Bundesliga y él está pensando en despedirse.
¿Por qué Hummels no juega y su forma no es buena?
Según los medios alemanes, al defensa no le resulta fácil gestionar este cambio de vida, más aún cuando el espectro del retiro está cada vez más cerca. Hasta el momento suma 23 minutos en total con los giallorossi y con casi 36 años, que cumplirá en menos de un mes, está claro que la situación no es idílica. Pero, ¿cómo le está yendo realmente a Hummels? Juric evidentemente no estaba loco si siempre lo mantenía fuera.
Incluso lo abandonó en Bruselas cuando faltaba el titular de la silla, N’Dicka, que también estaba en cama con gripe. Cristante estuvo en defensa ante el Saint-Gilloise, también en ausencia de Hermoso que no se había recuperado ni se ha recuperado de su lesión muscular. Había una razón, ¿no? Las pruebas deportivas, pero también los entrenamientos observados de cerca, han revelado que Hummels aún no ha alcanzado el nivel de sus compañeros. Le cuesta mucho si aumenta la intensidad del trabajo, incluso después de dos meses y medio en los que trabajó con gran profesionalidad en Trigoria.
En definitiva como ya hemos dicho, Ranieri, que fue el primero en preguntarse en la rueda de prensa «¿por qué no juega?». Y se dio una respuesta bastante rápida: el alemán no juega porque se encuentra en malas condiciones. Mientras tanto, se le espera hoy en Roma y mañana en Trigoria, si la fiebre lo permite, naturalmente.