Se sigue así, al menos hasta el próximo domingo, escribe Andrea Pugliese en La Gazzetta dello Sport. Los tiempos técnicos están realmente reducidos al mínimo, con la Roma que estará en Bruselas de mañana al viernes para el partido de la Europa League contra el Royal Union Saint-Gilloise y luego el domingo a las 15 horas recibirá al Bolonia en el Olímpico, en el último compromiso antes de la fecha FIFA.
Ayer el día en Trigoria transcurrió con ‘normalidad’, aunque de forma surrealista. Muchos esperaban una comunicación oficial de los propietarios, después de otro mal resbalón en casa de un Verona que venía de 6 derrotas en los últimos 7 partidos. El responsable del área técnica, Florent Ghisolfi, habló con el equipo informándoles de la continuidad del técnico giallorossi al frente de la Roma. Pero está claro que se trata de una confianza temporal, ligada también a los resultados que llegarán entre el jueves y el próximo domingo. También porque mientras tanto continúan las encuestas. Después del encuentro con Paulo Sousa y un acercamiento con Roberto Mancini, los Friedkins están tratando de entender qué hacer.
Claudio Ranieri nunca fue contactado, al igual que Daniele De Rossi, que ayer dejó Nueva York rumbo a Roma. Es probable que el nombre haya venido del extranjero, quizás por sugerencia de Retexo o algún directivo que los Friedkins conocieron en la Eca. Ayer, por ejemplo, la candidatura de Frank Lampard ganó fuerza, aunque no se contactó directamente con el inglés, que estaría disponible para aceptar el puesto con un proyecto definido.
El croata ha perdido la confianza de la afición que también ayer en las redes sociales y en la radio pidió a gritos su despido cuenta Francesco Balzani en el diario Leggo. Las derrotas ante Fiorentina y Verona y las palabras del técnico al final del partido no gustaron. Ni siquiera en los pisos superiores. La relación con el equipo es tensa desde hace algún tiempo.
Después de las discusiones con Mancini y Cristante, de hecho, está el descontento de otros piezas como Hummels y Paredes. Y varios nuevos fichajes también tienen dudas sobre el juego de Juric que acumula 4 derrotas y 2 empates en 10 partidos. Un horror mediático que empujó a la Roma hacia la zona de seguridad y con un calendario trepidante: Bologna, Napoli, Atalanta y Tottenham en menos de un mes. Un cambio de rumbo parece inevitable. Mientras tanto, Juric también entrenó ayer al equipo en una Trigoria desierta.
A última hora de la tarde, ante las puertas sólo apareció un King Kong gigante con una foto del presidente gitano y la inscripción: «Friedkin, este desastre es suyo». Los jugadores no se salvaron. Sobre todo Zalewski, que se espera que deje la Roma en enero.
A pesar de la derrota de Bentegodi ante el Hellas Verona, la familia Friedkin ha decidido no hacer ningún cambio todavía en el banquillo asegura Sky Sport. Al menos por el momento. Ivan Juric estará habitualmente en el banquillo en el partido de la UEFA Europa League contra el Union Saint-Gilloise. El técnico croata está en continuo contacto con el club, que le ha confirmado su confianza pero espera un cambio en los resultados. Sin embargo, Ivan Juric sigue siendo objeto de examen.