La posición de Ivan Juric en la Roma pende de un hilo. La derrota en Florencia generó mucho caos y hubo fuertes discusiones en el vestuario, confirmado también por el propio entrenador.
Ayer en el último entrenamiento previo al enfrentamiento ante Torino intentó compactar el ambiente y decidió blindar el entrenamiento cuenta Corriere dello Sport. Durante la sesión no estuvieron presentes ni los fotógrafos ni los responsables de las redes sociales del club Giallorossi. De hecho, las habituales fotos no fueron publicadas en el sitio web del club ni en Instagram.
El croata, pidió no tener a nadie fuera del grupo del equipo: ni fotógrafos, ni operadores, ni elementos de los demás sectores del club. Sólo él, su personal y el equipo: nadie más. Esta noche el futuro está en juego contra su ex equipo. Aunque admitió que no estaba pensando en el último recurso.