Cuando quedan poco más de tres semanas para el cierre del mercado de verano, a Ghisolfi todavía le queda mucho trabajo por hacer. De hecho, el director está ocupado en dos frentes: por un lado, trabaja con una plantilla que hay que aligerar, por otro, está centrado en querer dar a De Rossi las últimas piezas necesarias para construir un equipo capaz de competir por la Champions de nuevo.
En cuanto a las salidas, se sigue trabajando para buscar acomodo a esos jugadores que no cuentan: el más cercano a la venta parece ser Ebrima Darboe, que volverá a jugar en la Serie B, con Salernitana o Frosinone quienes compiten para hacerse con su servicios cuenta este miércoles el diario Il Tempo.
Eldor Shomurodov, por quien el Hellas Verona está interesado, podría permanecer en la Serie A. En cambio, las ganancias más importantes podrían provenir de Bove y Abraham, por quienes se esperan ofertas.