Federico Chiesa no forma parte del proyecto de la Juventus. El extremo no está en la convocatoria para el partido amistoso de esta tarde entre el equipo de Motta y el Brest. No hay ningún motivo físico sino una decisión técnica ligada al mercado de fichajes. El futuro del ex Fiorentina sigue en juego.
En las últimas semanas, la Roma se había convertido en el equipo más interesado en Chiesa, pero el jugador no quedó convencido del proyecto y declinó la propuesta. A partir de ese momento Ghisolfi decidió recurrir a Soulé quien, a diferencia del futbolista clase del 1997, inmediatamente dijo «sí». Hasta la fecha, Federico es un jugador apartado de la Juventus y no han llegado ofertas concretas a la mesa de Giuntoli. De Rossi ha pedido un extremo izquierdo y tiene un gran respeto por el jugador. Por el momento, sin embargo, no ha habido ningún flashback.
Los próximos 27 días del mercado de fichajes ayudarán a la Juventus y al extremo a encontrar una solución cuenta La Gazzetta dello Sport. Las conversaciones sobre la renovación van cuesta arriba. En la Continassa intentarán vender a Chiesa hasta el 30 de agosto para evitar el riesgo de perderlo en una transferencia gratuita en 2025. La Juventus persigue un cheque de 20 millones para despedirse de Chiesa. La oferta adecuada podría llegar desde Inglaterra (Chelsea, Aston Villa, Tottenham), donde estuvo recientemente el agente del jugador.