Hasta ahora el barómetro dice calma absoluta. Ninguna sorpresa, al menos aparentemente. Pero la tormenta podría estallar pronto, a partir de la próxima semana, escribe Andrea Pugliese en La Gazzetta dello Sport. Y entonces la alarma en torno a Paulo Dybala también podría volverse importante, digamos roja, en una posible situación de emergencia. En inglés alerta roja. En efecto, los Red Devils, dado que es el Manchester United el que ha puesto sus ojos en ‘La Joya’, han identificado al argentino como uno de los recursos útiles para redimirse de una temporada pasada decepcionante durante mucho tiempo (octava plaza en la Premier League y eliminación en la fase de grupos de la Champions, posiciones parcialmente compensadas por la victoria de la Copa FA).
Los primeros rumores circularon en Argentina hace unos días, luego se confirmaron también en Inglaterra en las últimas horas. Erik ten Hag ha pedido al Manchester United que se mueva por Paulo Dybala. Una petición considerada no excesiva, pero plausible, teniendo en cuenta también el «pequeño» valor de la cláusula del campeón del mundo, apenas 12 millones. Por supuesto, el técnico neerlandés (en Manchester desde el verano de 2022) ha perdido algo de poder e influencia sobre la propiedad anglosajona, en particular sobre Sir Jim Ratcliff, considerado por Forbes el hombre más rico del Reino Unido, con un activos estimados en 2023 en 22,9 mil millones de dólares.
Pero la solicitud podría ser aceptada, porque entonces el United también sabe que Dybala aún puede moverse mucho. O, al menos, es una petición que podría llevar al Manchester United a intentarlo, porque entonces se necesita el consentimiento final del talento argentino para que la operación se lleve a cabo. Sin lo cual esa cláusula no tiene valor…