La gran incertidumbre en la Roma es cual será el ataque de mañana. La importancia del ataque está certificada por los goles marcados en la Serie A (63), y es gracias a ellos que los Giallorossi todavía esperan acceder a la próxima Champions a través del campeonato. De hecho, ningún equipo del primero al quinto puesto ha encajado tantos goles como los Giallorossi (44). Para compensar las carencias defensivas, estaban los laterales y los delanteros centro que, en el caso de la Roma, podrían decir adiós en verano cuenta este sábado Il Messagero.
Si para Dybala (que se ha recuperado para mañana con el Genoa) la condicional es imprescindible dada la cláusula de rescisión de 13 millones que se activará en julio (ayer entrenó en grupo y jugará con el Genoa), para Lukaku es más correcto utilizar el indicativo. El belga se despedirá al final del campeonato y regresará al Chelsea. Los ‘blus’ intentarán venderlo por un precio de oro (37 millones de libras) gracias a su actuación en la Serie A (20 goles, 4 asistencias y 46 partidos). Aunque no haya brillado en las últimas semanas, hay que recordar cuánto ha impactado a lo largo de la temporada. Además, con una reserva a la altura que le hubiera dado más descanso, probablemente habría conseguido mejores resultados incluso en los últimos meses. Ese reserva se llamaba Belotti que fue cedido a la Fiorentina en enero. Mourinho no estaba satisfecho y el club tampoco, ‘Il Gallo’ volverá al final de la temporada a menos que la Viola decida ficharle de manera permanente.
El otro que tuvo que debía a Big-Rom fue Azmoun, que llegó cedido procedente del Bayer Leverkusen. Sardar regresará a Alemania y no será rescatado por 12,5 millones precisamente porque el impacto en la temporada de la Roma fue prácticamente nulo: 28 apariciones de las cuales 5 como titular y sólo tres goles. Es casi seguro que Tammy Abraham no se irá, aunque al inglés le gustaría regresar al Reino Unido. La única esperanza para él es que algún club de la Premier esté dispuesto a ficharle y que la Roma esté de acuerdo. Un fichaje definitivo está prácticamente descartado debido a la lesión que le mantuvo nueve meses en la enfermería. Regresó hace poco, pero sus actuaciones no convencieron. El sensacional gol fallado contra el Leverkusen es la instantánea de una devolución ineficaz.
Es, sin embargo, una de las pocas certezas que Daniele De Rossi tiene por delante, sobre todo cuando, a principios de julio, comienza la preparación veraniega a la espera de que el nuevo director deportivo entre en el mercado de fichajes. La otra certeza de la derecha, además de Baldanzi, será Paulo Dybala, que se incorporará muy tarde al retiro debido a la Copa América. A menos que llegue una oferta de algún club extranjero que active la cláusula liberatoria y le garantice un salario superior a los 7 millones.
No faltarán Solbakken y Shomurodov durante los entrenamientos de verano, quienes regresarán de sus respectivos préstamos a la espera de ser colocados nuevamente. La presencia de El Shaarawy (entrenamiento individual ayer) estará garantizada en la banda izquierda, a De Rossi le gusta y está consiguiendo darle forma. Intentará trabajar su forma física para aprovecharlo al máximo durante su último año de contrato. La presencia de Zalewski que saldrá al mercado es más incierta.