El Consejo Federal de la FIGC aprobó el plan estratégico para el fútbol con casi unanimidad de votos a favor y la única abstención de la Serie B.
Según informa la agencia ANSA que los principios y nuevos parámetros económico-financieros que hacen estrictas las obligaciones de los clubes no han sido aprobados insertando el índice de liquidez, el indicador de deuda y el índice ampliado de costes laborales para la Serie B y C, mientras que para la Serie A se opto por la linea de las normas de la UEFA.
La FIGC ha añadido durante el año una serie de controles adicionales destinados a garantizar una gestión sostenible de los clubes, previendo sanciones aún por definir en caso de infracciones. Lorenzo Casini, presidente de la Lega Serie A, comentó luego la elección con estas palabras recogidas por La Gazzetta dello Sport: «El plan estratégico para el fútbol italiano se ha construido en los últimos meses a partir de las contribuciones de los distintos componentes, la Serie A ha reconocido que una gran parte de las propuestas del documento provienen de nosotros, por lo que por coherencia y responsabilidad institucional sobre los principios subyacentes expresamos una posición favorable.
Obviamente condicionada a que la aplicación de algunos aspectos corresponda a lo solicitado no cambia el proyecto que está llevando a cabo la Serie A para llegar a un modelo de mayor autonomía e independencia inspirado en el inglés. Cuando tengamos el proyecto esperamos el entusiasmo de todos al verlo y recibirlo porque una Serie A más fuerte y autónoma. Que funcione mejor y produzca más recursos es una ventaja para todo el fútbol italiano».
