La piedra angular de la defensa de la Roma esta jugando con un dolor en la ingle. Gianluca Mancini no pudo terminar el partido contra el Bologna, Mourinho lo sustituyó porque estaba a un paso de una lesión más grave, escribe Gianluca Lengua en Il Messaggero.
Hasta la fecha, la inflamación de los aductores de Mancini se ha manejado con algunos entrenamientos diferenciados, cuidados médicos, terapias y cuando era necesario reposo, como ocurrió en Europa ante Servette y Sheriff. Pero ahora que el tren de partidos que espera a los Giallorossi será decisivo para el futuro, no se podrá prescindir de Mancini. Los problemas musculares del defensa se suman a las decepcionantes actuaciones de Pellegrini y Spinazzola. Sumado al cansancio de Cristante que desde hace tres o cuatro partidos ya no es el centrocampista que era al inicio de temporada.
Sin embargo, habrá que evaluar las condiciones de Gianluca Mancini. El central, que sigue además jugando con el peso de estar a una amarilla de la sanción, tiene que lidiar con una lesión que arrastra desde hace tiempo, según reveló el propio Mourinho tras el pitido final. «Mancini está en grandes dificultades – dijo el Special One a DAZN – está jugando con una pubalgia fuerte y jugó porque el equipo lo necesita«. Y, dada la emergencia en defensa, con Smalling lleva más de tres meses fuera, es difícil esperar una solución diferente.
