Hoy la hinchada de la Roma, impulsado por Mourinho, también es protagonista en el balance, escribe Francesco Balzani en el diario Leggo. Los continuos ‘Sold Out’ y el merchandising récord aportaron 72 millones a las arcas de la Roma.
En particular, la venta de entradas y abonos de la Serie A registró un positivo de 32,6 millones, que se suman a los 13 de partidos de la UEFA y los 3,6 de la Copa de Italia, partidos y torneos fuera de casa. La venta de camisetas también está en auge, y la de Dybala figura entre las más vendidas en Europa. Y las cifras están destinadas a aumentar cada vez más. También el domingo ante la Fiorentina el Olímpico estará lleno y listo para apoyar a Mourinho con pancartas y cánticos.
Un partido que puede valer mucho teniendo en cuenta que también se jugará el Napoli-Juve y que verá a los Giallorossi casi al completo (aparte de los pacientes de larga duración Smalling y Abraham): incluido Pellegrini que busca la redención tras su reciente actuaciones decepcionantes. El capitán no marca en Liga desde el 1 de octubre ante el Frosinone, pero últimamente también ha sido culpable de su especialidad local: las asistencias que gritan el número cero. El año pasado a estas alturas ya estaba en el 4. Mourinho piensa relanzarlo desde el primer minuto con Dybala y Lukaku. Pero ahora también está en liza Azmoun, que ha superado a Belotti.